Más Allá del Mundo Real: Las Enseñanzas de Don Juan

Autores:

Acosta Arribasplata, Heidy Lizeth

Araujo Saucedo, Wilson Kevin

Olivares Santisteban, Jhordy Alexander

 medida que avanza el siglo XXI, es necesario redescubrir las antiguas enseñanzas de las plantas alucinógenas, en la obra Las enseñanzas de don Juan de Carlos Castaneda, que, según el chaman, un sabio yaqui, son más que meras sustancias: son portadoras de profunda sabiduría y transformación espiritual. A través de las experiencias de Carlos Castaneda, se nos invita a explorar las dimensiones ocultas de nuestra conciencia, mostrando que cuando se usan con respeto y con un propósito, estas plantas pueden abrir puertas a realidades inesperadas. En un mundo que a menudo parece desconectado de su esencia espiritual, las lecciones de Don Juan nos recuerdan que el autoconocimiento y la conexión con lo divino pueden estar a nuestro alcance. La pregunta flota en el aire: ¿Estamos preparados para embarcarnos en este apasionante viaje hacia lo desconocido?

Don Juan usó, por separado y en distintas ocasiones, tres plantas alucinógenas: peyote (Lophophora williamsii), toloache (Datura inoxia syn. D. meteloicles) y un hongo (Psilocybe mexicana). Desde antes de su contacto con europeos, los indios americanos conocían las características alucinógenas de estas tres plantas. A causa de sus propiedades, han sido muy usadas por placer, para curar en la brujería, y alcanzar un estado de éxtasis. (Castaneda, 1960. pp.4,5)

Este fragmento refleja la curiosidad que tenían estos pueblos por investigar y conocer las propiedades de las plantas alucinógenas, lo que los llevó a utilizarlas en muy diversos campos debido a sus múltiples propiedades. Sin embargo, creemos que con el tiempo gran parte de este conocimiento se ha perdido, lo que ha provocado que estas plantas queden relegadas a un segundo lugar en la ciencia y medicina modernas. Hoy en día nos basamos más en tratamientos científicos para aliviar enfermedades, mientras que antiguamente muchas enfermedades se trataban con plantas medicinales. Entonces surge la pregunta: ¿Qué lecciones podemos aprender de las prácticas tradicionales de nuestros antepasados para promover el uso responsable y ético de las plantas alucinógenas? Asimismo, ¿cómo podemos contribuir al resurgimiento de las tradiciones indígenas asociadas a su uso?

En el contexto específico de sus enseñanzas, don Juan relacionaba el uso de la Datura inoxia y la Psilocybe mexicana con la adquisición de poder, un poder que él llamaba un "aliado". Así mismo, relacionaba el uso de la Lophophora williamsii con la adquisición de sabiduría o conocimiento de la buena manera de vivir. (Castaneda, 1960. p.5)

De este fragmento podemos concluir que, en diversas culturas, las plantas son consideradas aliadas. Estas desempeñaban un papel específico en la búsqueda de poder y sabiduría. Además, facilitaban el crecimiento personal y espiritual brindando diferentes experiencias y aprendizajes. Así contribuyeron al camino del conocimiento y la transformación. La obra Las enseñanzas de Don Juan nos invita a explorar el potencial de las plantas alucinógenas para la expansión de la conciencia y el crecimiento personal; además, se aprecia la distinción que él hace entre el poder y la sabiduría, y cómo se relacionan con diferentes plantas. Por otro lado, la búsqueda del poder se asociaba con la Datura Inoxia y los Hongos Psilocybe, este es un camino complejo y peligroso, aunque puede conducir a una mejor comprensión de la realidad y a una conexión con fuerzas ocultas. Por otro lado, la búsqueda de la sabiduría, vinculada con el peyote, surge como un camino más armonioso, enfocado al conocimiento y la conexión con el universo.

Es fundamental reconocer que estas plantas son herramientas poderosas. Deben usarse con cuidado y precaución. No son caminos fáciles ni rápidos hacia el poder o la sabiduría. Más bien, requiere perseverancia y respeto. ¿Experimentar con plantas alucinógenas es el único camino hacia la sabiduría?, ¿Cómo podemos evitar la explotación y la venta de estas plantas para su uso indebido?

Y, en realidad, ¿las plantas otorgan poderes?

-Ahora que sabes un poco más sobre la yerba del diablo y el humito, puedes decir con más claridad a cuál de los dos prefieres —dijo don Juan.

 

-En serio, el humito me da terror, don Juan. No sé exactamente por qué, pero no le tengo buen sentimiento.

-Te gusta el halago, y la yerba del diablo te halaga Igual que una mujer, te hace sentir bien. El humito, en cambio, es el poder más noble, el que tiene el corazón más puro. Ni incita a los hombres ni los aprisiona; ni ama ni odia, Todo lo que requiere es fuerza. La yerba del diablo también requiere fuerza, pero distinta. Algo más parecido a ser ardiente con las mujeres. En cambio, la fuerza que el humito requiere es la fuerza del corazón. Él no es como la yerba del diablo, llena de pasiones, celos y violencias. El humito es constante. No tienes que preocuparte de que a lo mejor se te olvidó algo y te va a llevar la chingada. (Castaneda, 1960. p.54)

El uso responsable de las plantas alucinógenas es muy importante, ya que, en ausencia de conocimiento, se desconoce el poderoso impacto que tendrían en la realidad del autor. Estas plantas tienen diversas propiedades y sus consecuencias pueden ser positivas o negativas, dependiendo del contexto y propósito de su uso. Por lo tanto, desempeñan un papel e influencia diferente en el viaje espiritual. La comparación que hace Don Juan entre la “yerba del diablo" y el "humito” es una metáfora brillante de la naturaleza de la fuerza y poder. Sus descripciones de la “yerba del diablo” como seductora, apasionada y peligrosa, y del "humito” como noble, constante y conectado con el corazón, nos invita a considerar los diferentes caminos que podemos tomar para buscar la verdad y la transformación personal. Además, nos muestra con qué frecuencia las personas cometen errores en sus elecciones; al igual que el escritor, que creía que la planta del humito era dañina en el momento de decidir, cuando en realidad era la más noble y beneficiosa.

La sabiduría de Don Juan nos invita a explorar la complejidad de la naturaleza humana y a darnos cuenta de que la fuerza y el poder pueden ser herramientas tanto de destrucción como de creación; por lo tanto, es nuestra responsabilidad elegir el camino que nos lleve a la verdadera sabiduría y conexión con lo divino. ¿Cómo podríamos aplicar estas enseñanzas de Don Juan en un contexto moderno? ¿Cómo podemos distinguir entre la verdadera sabiduría, que nos libera, y la manipulación, que nos aprisiona?, y ¿Cómo podríamos vencer el deseo, la pasión y la toxicidad en este mundo actual?

La importancia de las plantas consistía, para don Juan, en su capacidad de producir faces de percepción peculiar en un ser humano. Así, me guio al experimentar una serie de tales etapas con el propósito de exponer y validar su conocimiento. Las he llamado "estados de realidad no ordinaria”, en el sentido de realidad inusitada contrapuesta a la realidad ordinaria de la vida cotidiana. La distinción se basa en el significado inherente a los estados de hechos no ordinarios. (Castaneda, 1968. p.5)

Este fragmento representa una visión chamánica de las plantas que pueden abrir puertas a diferentes dimensiones de percepción, accediendo así a una sabiduría que no está disponible en la realidad ordinaria. Por tanto, las plantas no son solo elementos físicos, sino también puentes hacia un conocimiento más profundo y espiritual. Se sabe que tienen propiedades medicinales que ayudaron a nuestros antepasados y a nosotros (sus descendientes) a aliviar enfermedades. Sin embargo, también se han observado casos en los que las propiedades de estas plantas están relacionadas con lo mágico, y algunas personas sostienen que estos hechos son reales, lo que da razón a sus características no ordinarias. A pesar de esto, Castaneda exagera un poco al atribuir a las plantas poderes que parecen ir más allá de lo real o comprobable en la experiencia humana, ya que estas afirmaciones parecen estar más vinculadas a creencias propias de ciertas culturas que a hechos verificables, fundamentándose más en tradiciones e interpretaciones místicas que en la realidad moderna. ¿Tienen las plantas propiedades que trascienden la vida cotidiana? ¿Pueden las plantas alucinógenas transportarnos a otro mundo o son simples alucinaciones?

La obra de Carlos Castaneda Las Enseñanzas de Don Juan nos brinda una experiencia única al explorar el uso de las plantas alucinógenas, utilizadas tradicionalmente para la curación y para acceder a mundos no ordinarios. Hoy en día, sin embargo, su valor ancestral se ha quedado eclipsado, y a menudo se utilizan solo con fines recreativos. Las plantas alucinógenas tienen enormes beneficios y riesgos. Por un lado, pueden facilitar experiencias místicas y espirituales, promover la conexión con la naturaleza, y ayudar en el tratamiento de afecciones psicológicas, como la depresión y la ansiedad. A pesar de ello, existen peligros asociados a su uso, como la posibilidad de desencadenar o agravar trastornos mentales, provocar experiencias negativas o "viajes malos", y la tendencia a un consumo de manera irresponsable lo que afecta la percepción de la realidad. Además, su estatus legal y estigma social les dificultan integrarse responsablemente a la sociedad. Por ende, se debe utilizar con precaución y un profundo respeto por su potencial. 

Referencia:  

Castaneda, C. (2001). Las enseñanzas de Don Juan: una forma yaqui de conocimiento. Universidad de California